Maniobras para mantener la agilidad en el arco

15/04/2020

Se cumplió un mes desde que la plantilla se alejó forzosamente de las canchas. Si bien es cierto el entrenamiento desde los hogares no se ha detenido, el jugador extraña el pase con el borde interno del pie, el despeje largo en salida desde el fondo del defensor o la habilitación de 60 metros del arquero para dejar mano a mano al atacante en un contragolpe.

 

Solamente una dura lesión los alejó tanto de lo que aman, del juego. Nunca antes un período se había prolongado tanto. “Siempre hemos estado en contacto todos los compañeros. Conversamos mucho sobre la situación. La ansiedad por regresar siempre ha estado ahí, pero la prioridad pasa porque termine todo este mal sueño que estamos viviendo. Ha sido un tiempo realmente muy triste el cual espero se acabe pronto, para que podamos regresar a las canchas a realizar lo que nos gusta y volver a brindar alegrías a todos los fanáticos que nos siguen en cada partido”, señaló Cristhian Flores, portero del Caracas Fútbol Club.

 

El defensor del arco capitalino ha tenido que ponerle un extra a su rutina diaria de ejercicios. Más allá de llevar a cabo lo que le pide Javier Milan, preparador físico del primer equipo, también ejecuta una rutina dirigida por el preparador de porteros de la institución, Maickel Romero.

 

“Los ejercicios son cortos en espacios reducidos. Trabajos de rotación de caderas, velocidad gestual de las manos, recrear pequeños movimientos con los que se encuentra un portero en un partido o en un entrenamiento en una cancha normal. Hemos adaptado las rutinas a ejercicios que se pueden llevar a cabo en casa, como por ejemplo rebotar una pelota contra la pared, dejarse caer sobre un colchón, indicaciones que han llevado a cabo los porteros de acuerdo a la planificación que se les manda”, explicó Romero.

 

Cuesta imaginarse a un arquero de un metro con noventa y tres centímetros llevar a cabo rutinas con pelota en su hogar, pero como reseña Flores, “el profesor Romero se enfocó en trabajos que se pudiesen adaptar al espacio de nuestras salas o habitaciones para así no perder nuestra agilidad corporal, la rapidez de brazos, la agilidad en las piernas para los desplazamientos cortos y las reacciones. Rutinas que pueden durar entre 20 o 25 minutos, dependiendo de la velocidad con la que uno haga los trabajos”.

 

Romero pide que reboten la pelota en las paredes. “Es necesario que no se desacostumbren a agarrar el balón como porteros que son”, subraya. Hoy no puede asistir a Flores en el arco norte de la cancha de Cocodrilos Sport Park. En vez de ello se graba haciendo el ejercicio y se lo manda en vídeo para que lo pueda tener como ejemplo.

 

“La grama artificial se ha reemplazado por colchones, para de alguna manera mantener los gestos en algunos movimientos, no perderlos y tenerlos allí activos. Los trabajos con pelotas, pequeñas o grandes, rebotándolas en la paredes sirve para mantener la agilidad, la parte cognitiva y que los reflejos se mantengan activos”, resaltó Flores, quien recordó que hoy su principal asistente en las rutinas es su esposa Roseanne Vegas.

 

La rutina en Cuarentena. Flores señala que a pesar de no dirigirse al Cocodrilos Sport Park por las mañanas a entrenar a las siete, no ha perdido el habito de levantarse temprano. “Psicológicamente estoy habituado. En la mañana realizamos los ejercicios que nos manda el preparador físico, luego ejecuto los que manda Romero y seguido a eso me dispongo a los quehaceres del hogar. Agradezco enormemente compartir con mi esposa un tiempo que entre la temporada por los viajes y las concentraciones es difícil de encontrar. De vez en cuando vemos una que otra película, pero el tiempo libre lo consumo más que todo en la lectura; también estoy realizando un curso de inglés en línea, me inscribí para realizar un curso de emprendimiento y de esa forma logro que los días sean más ameno y pasen más rápido”, mencionó.

 

Y más allá de sus habilidades para detener los disparos de los atacantes contrarios, el “Pulpo” Flores aprendió en estos últimos días que también puede ser un chef en la cocina. “Pude hacer un pollo al horno, arroz chino, pizzas y  otros platos que hemos ido inventando, copiando un poco las recetas que aparecen en las redes sociales. Tratamos de que queden lo más parecidos posibles y la mayoría de las veces ha quedado”, concluyó entre risas el portero de 29 años de edad

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