18/09/2020
“Caracas es un equipo que tiene un proyecto de darle la oportunidad a los jóvenes. Hoy es un equipo que tiene en la banca a jugadores del 2003, 2002 y 2001 y la idea era sacarle provecho a los futbolistas importantes (los referentes del club) y que los jóvenes aprovechasen los minutos que se le darían”, expresó Noel Sanvicente en la rueda de prensa posterior al triunfo ante el Deportivo Independiente Medellín en Colombia.
El once inicial colocado en cancha tuvo un promedio de 25,40 años de edad, pero debido al largo período de inactividad y el desgaste ocurrido en el partido, el entrenador del Caracas realizó los cinco cambios reglamentarios con lo que les dio la oportunidad a jóvenes figuras del club.
Tres de los cinco futbolistas que ingresaron cuentan con 20 años (Junior Moreno, Jorge Echeverría y Osei Bonsu), mientras que el último de los cambios, Saúl Guarirapa, es un futbolista de 17 años y 11 meses que la temporada pasada disputó el campeonato sub-19 elite y también sumó 13 partidos y anotó tres goles con el equipo campeón de reserva.
Con los cinco cambios el promedio bajó a 22,59 años, probablemente uno de los más bajos de toda la Copa CONMEBOL Libertadores sino el más bajo de todos. Aunado a este factor, la figura del compromiso fue Anderson Contreras, otra joven promesa que el año pasado se afianzó en el once inicial que finalizó campeón de la temporada 2019 y que con tan solo 19 años y seis meses deslumbró con su calidad técnica al continente.
“Llevo siete años en el club y estoy muy contento con la directiva del equipo por la confianza que me han dado tanto ellos como el plantel. Siempre practicamos la pelota parada que es una de nuestras fortalezas. Afortunadamente ya pude marcar en Copa, algo que ya había hecho en el torneo local”, comentó en la rueda de prensa post-partido, en el que anotó una joya de tiro libre y dio dos asistencias.
Otros factores determinantes.
“Nunca paramos en la pandemia. Siempre estuvimos activos y trabajando en todo momento; cuando no estuvimos en cancha siempre trabajamos por Zoom o videollamadas. Manejamos los tiempos del partido para siempre presionar y aprovechar cuando estuviesen mal parados”, analizó Contreras.
“Nosotros somos un equipo muy unido. Aprovechamos a los jugadores rápidos por afuera al tratar de salir jugando en paredes en cortico, a dos toques, siempre dándole la responsabilidad puesto que son los mejores que tenemos para que encaren y realicen su mejor juego individual”, explicó.
Sanvicente coincide con lo explicado por su pupilo: “En los dos partidos previos se hicieron goles y la idea era tener paciencia, hacer buenos movimientos cargando por fuera y llegar en pared. Se dio así y hoy nos vamos felices por el resultado”.
Además el director técnico de los Rojos del Ávila quiso rescatar el trabajo de la zaga capitalina. “Defensivamente el equipo se comportó bien. Los goles llegaron producto de un error y un penal. Aprovechamos los momentos justos, supimos defender y los jóvenes aprovecharon su oportunidad manteniendo el resultado” concluyó.
Escrito por: Héctor Rojas
